Sí, me encanta demasiado, pero no por eso correré a decirle que lo quiero.
Sí, soy capaz de arriesgarme, pero eso no quiere decir que no tenga miedo.
Sí, me mata que no me hable, no me mire, no me escriba, pero no significa que tenga celos de a las que si.
Sí, soy tímida, tonta, incomprendida, rara, pero no por eso seré como el resto.
Sí, me enamoro rápido y fácilmente, pero no significa que no sea igual cuando me desenamoro.
Sí, me ilusiono de vez en cuando, pero no significa que soñar no cueste nada.
Sí, no soy correspondida, pero no por eso lo voy a odiar.
Sí, tengo experiencia sufriendo, pero no quiere decir que no aprendo cosas nuevas cada día.
Sí, sé muchas cosas, pero lo que más necesito saber no lo sé.
Sí, que a malas palabras, oídos sordos, pero no significa que no me afecte.
Sí, tengo un plan para todo, pero nunca sale como lo esperó.
Sí, suelo ser espontanea, pero eso me vuelve predecible ante el resto.
Sí, que cuando me preguntan respondo, pero no quiere decir que sea cierto.
Sí, me pondría contenta si me quisiera al menos un poco, pero yo soy feliz con o sin él.
Sí, todo pasa por una razón, pero no significa que nunca me arrepienta.
Sí, trato de prepararme para lo peor, pero la esperanza es lo último que se pierde.
Sí, que prometí muchas cosas, pero que muchas ya es imposible cumplirlas.
Sí, que odio lo cursi, pero eso me convierte en la romántica que soy.
Sí, que quiero olvidar muchos momentos, pero que olvidar es querer recordar.
Sí, que quiero pasar mas tiempo con mi familia, pero que a veces estar sola es lo mejor.
Sí, de vez en cuando me equivoco, pero que tardo en asimilarlo.
Sí, que extraño a los que ya no están, pero eso no es razón para llorar.
Sí, que él no se da cuenta de mis indirectas, pero es que tampoco sé hacerlas.
Sí, que existe el deseo de que no sea amor lo que siento, pero es por que no recuerdo que es un sentimiento maravilloso.
Sí, que lo he besado, abrasado, querido, pero que solo ha sido en mis sueños.
Sí, que juzgar a la primera vista lo hacemos todos, pero luego descubrimos que nada es lo que parece.
Sí, que mi madre y yo no nos entendemos, pero que con todo eso la amo.
Sí, que no me gustan los cumpleaños, pero es el único día en que uno se da cuenta quien se acuerda de ti.
Sí, que sigo queriendo a mi ex, pero no por eso vamos a volver.
Sí, que las noches son tristes, pero mirar las estrellas lo cambia todo.
Sí, que soñar lo que quiero que pase es fascinante, pero despertar por las mañanas es aún mejor.
Sí, que tomo decisiones apresuradas, pero no significa que no las pueda volver a tomar.
Sí, que saber que hacer es lo mejor que te puede pasar, pero que lo desconocido es mas interesante.
Sí, que hay que ayudar a los amigos cuando están mal, pero que tampoco podemos hacer milagros.
Sí, que desear la felicidad es natural, pero que no nos damos cuenta de que siempre ha estado con nosotros.
Sí, que cuando algo sale como lo planeaste te sientes bien, pero que cuando algo te toma por sorpresa no hay palabras para describir la felicidad.
Sí, que nada mas pensar en leer me hace bostezar, pero que al empezar no puedo detenerme.
Sí, que este no es un escrito como los otros, pero no quiere decir que no tenga la misma importancia.
Me he quitado un peso de encima, creyendo que con esto ya aclaro mi manera de ver las cosas. Me hace sentir bien conmigo misma, por que querer entenderme un poco mas siempre me torturara, sin embargo el misterio de lo que no comprendo es lo que lo hace fascinante. Mis sinceras disculpas a una querida amiga, no creo que nadie pueda hacerme molestar por un chico, jamás le he tenido rencor, celos, envidia o lo que se le parezca, a ninguna amiga o amigo cuando otros están involucrados, pienso que es una acción inmadura. Creo que a la única persona que he celado es a mi padre, y fue cuando ya yo sospechaba de que algo le ocultaba a mi madre, como resulto acertada mi intuición, no me quedaron ganas de celar a nadie, sé que duele por que lo viví con mi padre, ya luego lo supere y madure esa parte de mi. Me siento estúpida, perdóname amiga si parecí molesta contigo, o "picada" como le dicen los entrometidos, por que siempre criticaran desde afuera, no hay que darle más importancia de la debida. Es mi manera de ser, yo actúo siempre como sí no tuviera sentimientos (solo por que no me dan ganas de demostrarlos), y cuando me detallan bien, piensan que el problema es con ellos, para nada, prefiero no darme mala vida, voy por ahí sin una sonrisa cuando no me dan ganas de sonreír, es natural en mi, solo pido que no me malinterpreten, sí pudiera estar enojada con alguien sería conmigo, sin embargo no tengo razones para hacerlo.
Natalys Abreu